Cantidad

12,080

plantas frutales

Presencia

6

municipios

Beneficiarias

147

mujeres

Antecedentes

En el marco de acciones de colaboración y con la finalidad de instrumentar en diversos municipios de los Altos de Chiapas y bajo el liderazgo de las mujeres campesinas indígenas, el modelo conocido como Milpa Intercalada con Árboles Frutales Diversificada (MIAF-D); el día el 04 de octubre del año 2022, se suscribió un Convenio de Colaboración de Acciones en Materia de Seguridad Alimentaria, Conservación y Manejo de Recursos Naturales e Inclusión Productiva y Económica de las Mujeres, entre la Secretaría de Igualdad de Género (SEIGEN) ,Secretaría de Agricultura Ganadería y Pescas (SAGyP), y las organizaciones: Desarrollo Alternativo e Investigación A.C. (DAI), Promotores del Autodesarrollo Sustentable de Chiapas S.C. DE R.L. DE C.V. (PROASUS), y Fondo para la Paz (FPP), el instrumento legal, tiene por objeto establecer las bases de coordinación, colaboración y alianzas estratégicas entre las partes para realizar acciones coordinadas, dirigidas a desarrollar estrategias productivas sustentables que fortalezcan la participación, inclusión y liderazgo de las mujeres productoras rurales, su seguridad alimentaria y autonomía económica.

La creación del proyecto, se origina con la finalidad de visibilizar a las mujeres de comunidades rurales que, con su trabajo, aportan sus conocimientos tradicionales en la conservación, selección y mejoramiento de las semillas nativas, así como, la asociación y diversificación de diferentes especies ornamentales, medicinales y alimenticias.

Lo anterior, resulta trascendental en virtud de que, en la actualidad la milpa continúa siendo el eje fundamental de la cultura y la economía campesina indígena; caracterizada originalmente, por su diversidad y asociación de múltiples cultivos, y que hoy presenta un uso excesivo de agroquímicos, con tiempos de descanso insuficientes, una tendencia al monocultivo y pérdida de semillas nativas.

Lo señalado aunado al cambio climático, la han convertido en un cultivo insostenible, generando un acelerado minifundismo, con rendimientos decrecientes, migración, empobrecimiento de la dieta y de la base nutricional de la familia, así como de los saberes y prácticas campesinas, que han conducido a la pérdida de la seguridad alimentaria y al incremento de enfermedades crónicas en el campo derivadas de la mala nutrición. (GAT, 2022).

Históricamente en las comunidades indígenas y campesinas del estado, la tenencia de la tierra es una figura que por usos y costumbres se les otorga a los varones, en el supuesto que son los tomadores de decisiones y quienes “trabajan la tierra”, con este proyecto se pretende reivindicar a las mujeres, quienes ahora son las principales protagonistas en la transmisión de saberes tradicionales a las futuras generaciones, en razón de ello, el proyecto marcó un precedente de inclusión, al beneficiar a mujeres indígenas y campesinas, incluso a aquellas que no ostentan la propiedad de la tierra.

Las mujeres campesinas, en la búsqueda de opciones para la generación de ingresos y para mantener la producción, constantemente enfrentan barreras para el acceso a recursos productivos, a la tierra, agua, capacitación, tecnologías, uso del tiempo y acceso a programas gubernamentales y dado que ellas son guardianas de la biodiversidad, derivado del pleno conocimiento sobre semillas criollas, plantas, herbolaria, el manejo de parcelas productivas, solares y animales domésticos, se logró la vinculación directa con la Secretaría de Igualdad de Género (SEIGEN) y con la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca (SAGyP) para la implementación de acciones conjuntas, con la finalidad de solucionar esta problemática y fortalecer el desarrollo agrícola, la autonomía alimentaria y la transformación de la calidad de vida en el medio rural.

El proyecto consistió en sembrar plantas de árboles frutales, asociadas con cultivos básicos (Maíz y frijol u otros), a esta técnica se le denomina Milpa Intercalada con Árboles Frutales (MIAF) que han presentado buenos resultados en el incremento en la producción para el autoabasto y la comercialización de excedentes, en los municipios de San Andrés Larraínzar, Santiago el Pinar, Pantelhó y Aldama.

Acerca del Proyecto

El proyecto se desarrolló bajo el diseño del Sistema MIAF, que es una tecnología multiobjetivo que busca aumentar el ingreso neto y el empleo familiar de los pequeños productores, proteger el suelo contra la erosión hídrica e incrementar la captura de carbono.

Principales componentes del sistema MIAF-D

Población objetivo

Mujeres campesinas que viven en zonas rurales e indígenas de los Altos de Chiapas.

Objetivos

Objetivo General

Impulsar el desarrollo integral de las familias a través del rescate de las sabidurías ancestrales de las mujeres indígenas, así como la innovación de las tecnologías sustentables, para la producción de alimentos, mejorando la utilización de los recursos naturales y la generación de empleos.

Objetivos Específicos

Metodología de Selección de Población Objetivo

El proyecto mujeres y maíz “diversificación productiva, estrategia para generación de alimentos e ingresos”; se alinea al objetivo 5.1 del Programa Estatal para la Igualdad de Género entre mujeres y hombres, que estable “Fortalecer la Autonomía económica y patrimonial de las mujeres para la superación de la desigualdad de género.

Se toma como base para la selección de la población objetivo a las mujeres que se encuentren en los municipios de pobreza y extrema pobreza, que Según CONEVAL, 2020, en el estado de Chiapas (San Juan Cancuc, Chanal, Aldama, Chalchihuitán, Chenalhó, Sitala, Chilón, San Juan Chamula y Ocosingo), 4,166 personas estaban en pobreza, 1632.7 en extrema pobreza y 1371.7 personas carecen de acceso a la alimentación nutritiva y de calidad.

Principalmente la selección de las mujeres, se deriva a partir de un escalado de capacidades iniciando con diagnóstico de seguridad de semillas, mejoramiento participativo de semillas locales, procesos de experimentación e intercambio de conocimientos a través de módulos demostrativos, experimentación campesina, ferias de parcelas, semillas y comidas campesinas.

Cerrando el ciclo con la implementación del sistema MIAF como una alternativa para mejorar la productividad de las parcelas, manejar la fertilidad del suelo y generar ingresos para las familias.

Resultados de la Entrega de Plantas y su Establecimiento

La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, (SAGyP) en coordinación con la Secretaria de Igualdad de Género (SEIGEN), entregaron en los meses de octubre del 2022 a enero del 2023, 12,080 plantas de frutales a familias productoras que participan en las organizaciones: Desarrollo Alternativo e Investigación A.C. (DAI), Promotores del Autodesarrollo Sustentable de Chiapas S.C. DE R.L. DE C.V. (PROASUS) y Fondo para la Paz (FPP).

Especies De Plantas Entregadas

Las organizaciones civiles en coordinación con el personal designado de cada Secretaria, realizaron la logística para recoger las plantas de los viveros y hacer su entrega en las comunidades.

Para el traslado de las plantas desde el vivero se tuvo el cuidado en el acomodo al interior del vehículo, de tal forma que las plantas más chicas se ubicaran en la parte superior de la carga, esto con la finalidad de evitar stress y quebraduras de ramas de las plantas.

Especie

8
especies

Cantidad

12,080
plantas

Establecimiento Del Sistema Miaf En Las Parcelas Consideradas En El Proyecto

Con el presente proyecto se han beneficiado a 147 mujeres de los municipios de Santiago el Pinar, San Andrés Larraínzar, Aldama y Pantelhó y Chalchihuitán del estado de Chiapas, con una superficie de 18.9 hectáreas, en la que se establecieron 12,080 plantas, con especies de durazno criollo, durazno diamante, guanábana, guayaba, limón persa, mandarina dancy, naranja valencia y zarzamora. Con la finalidad de aprovechar sustentablemente las pequeñas unidades de producción (parcelas) bajo temporal que ya están siendo cultivadas, principalmente por granos básicos en laderas de clima templado y tropical.

Es importante destacar que, en las unidades de producción, es común encontrar en las parcelas de las mujeres productoras, la milpa con más de 10 especies, que son utilizadas para autoconsumo, hierbas medicinales, uso de semillas nativas mejoradas (fitomejoramiento participativo) y la comercialización de excedentes, lo que le abona a la economía de las familias campesinas.